La mandarina es una fruta dulce que previene catarros e infecciones. Mejora la absorción de hierro, fundamental en casos de anemia.
Por su gran cantidad de vitaminas y minerales es ideal para consumirla después de entrenar y embarazo es fuente de vitamina A, vitamina C, vitamina B1 y B2, bioflavonoides (como el nobiletin), folato (similar al ácido fólico) y sales minerales, como el potasio, el calcio, el fósforo y el magnesio. La fruta entera puede ser aprovechada, ya que su corteza y hoja también son muy ricas en nutrientes.